Por Juan Tomás Valenzuela
Ahí viene un penco aguacero
denominado Gonzalo,
que creen que será más malo
que algún ciclón batatero.
Un pueblo que ya está encuero
por una crisis viral,
y ahora tenga que cargar
con este incordio climático,
no hay proceso democrático
que lo pueda sustentar.
Después de más de tres meses
de luchar contra este COVID,
contra el ñú, Lorena Bobbit,
y esta piara de burgueses,
también se nos aparece
este maldito ciclón,
que aunque no trae corrupción
cómo aquellos bandoleros,
trae un maldito aguacero
más dañino que Rondón.
Según cuenta la leyenda,
el ciclón que se avecina,
no es otro más que Medina
y otra de sus componendas.
Después de tanta jodienda
regando pan y salami,
vino Luis con su tsunami
y le pasaron el rolo,
a Gonzalo, a Torombolo
y a la reina de los Amish
Gonzalo, perdió el torneo
por tarado y por huevón,
y hoy, convertido en ciclón,
viene a hacernos un chapeo.
Pero esta vez, ni Pompeo
con sus famosas llamadas,
van a poder hacer nada
con la ira de este loco,
que está armando un saperoco
con Consuelo y con Cavada.
Gonzalo, lleno de odio
se ha convertido en ciclón
y dicen que ni Rondón
va a tener peor episodio.
Y aunque hoy Luis, es el custodio
de esta nación abnegada,
la venganza desatada
por este maldito ungido,
podría dejarnos moridos
cuando llegué esa vaguada.
Juan de los Palotes
23 julio 2020